Últimamente parecemos abonados al rondar estos puestos que ya conseguimos en Estoril (15º), anteriormente en Indianápolis (13º), y Sachsenring (13º) y ahora en el circuito malayo de Sepang (15º).
Estas posiciones casi rutinarias son en realidad muy significativas, ya que dan muestra no sólo de las cualidades de Luis en la adaptación a la categoría, sino de su regularidad como piloto, algo muy importante en cualquier piloto que opte a una clasificación tan importante como un Mundial.
En Malasia los problemas no fueron muy diferentes a los de la semana pasada en Australia, ya que aquí tampoco habíamos corrido nunca. Además, una pista tan ancha y rápida en muchos puntos hace difícil encontrar la trazada que te permita ir rápido.
Ahora nos quedan dos semanas hasta la próxima carrera donde por nuestra parte daremos por terminado el trabajo de un año, la traca final en Valencia con todos los campeones decididos, lo que nos hace terminar este post con el "cumplimenti, Valentino" por su noveno título mundial. Ya se sabe, "gallina vieja, hace buen caldo"
